El saldo de la balanza comercial española en el sector del arroz pasó a ser negativo en 2022 debido a un incremento de las importaciones -tanto en volumen como, sobre todo, en valor- superior al de las exportaciones. El déficit fue de 37 millones de euros. Según los datos provisionales del Ministerio de Agricultura, el volumen importado superó las 400.000 toneladas, un 44% más que el año anterior y casi el doble de la media de los últimos cinco años. Ese incremento coincide con una producción en nuestro país muy inferior a la de los años previos.
El primer proveedor del mercado español fue Myanmar, cuyos envíos alcanzaron el año pasado los 58 millones de euros, casi el triple que en 2021 (20 millones). También crecieron considerablemente las importaciones procedentes de Pakistán (49 millones de euros, frente a 21 millones el año anterior), Argentina (45 millones frente a 21), Uruguay (18 millones frente a 3) y Tailandia (18 millones de euros en 2022 frente a 9 millones en 2021).
En cuanto a las exportaciones, Bélgica, Francia, el Reino Unido, Portugal y Estados Unidos fueron los principales destinos del arroz español.
Producción un 44% más corta
Ese tirón de las importaciones coincidió con una producción de arroz en España sensiblemente más corta que la del año anterior. El dato provisional del Ministerio de Agricultura da cuenta de un volumen de 354.500 toneladas, frente a 632.500 toneladas en 2021, es decir, un 44% menos. La caída se debió tanto a una disminución de la superficie sembrada (por los fuertes recortes en las dotaciones para riego) como a una caída de los rendimientos, en algunas zonas por las elevadas temperaturas y en otras por un exceso de lluvias que favorecieron la aparición de hongos.
Las estimaciones para el presente año 2023 también son de cosecha corta. El Ministerio maneja una superficie ligeramente inferior a la de 2022 y un volumen de 353.100 toneladas, prácticamente el mismo que el año pasado. Por su parte, Cooperativas Agro-alimentarias de España apunta a 325.021 toneladas (234.822 toneladas de arroz tipo Japónica y 90.199 toneladas de arroz Indica). Las cooperativas han subrayado que la sequía y el calor han vuelto a afectar al cultivo y también atribuyen esta baja producción a la falta de materias activas para hacer frente a las malas hierbas y las plagas.