Los comerciantes europeos de cereales, agrupados en COCERAL, han revisado al alza su previsión de producción de grano de este año en España, que sitúan ahora en 25,46 millones de toneladas, frente a los 22,73 millones que recogían en su estimación del mes de agosto.
Han elevado las cifras correspondientes al trigo blando y duro, la cebada y el maíz. La previsión de los comerciantes coincide con las últimas cifras del Ministerio de Agricultura, que apuntan a un total de 25,42 millones de toneladas, aunque hay diferencias por tipos de grano.
El desglose de la nueva estimación de los comerciantes entre los distintos cereales es el siguiente: trigo blando, 7,066 millones de toneladas; trigo duro, 1,109 millones; cebada, 10,413 millones; maíz, 4,691 millones; avena, 1,109 millones de toneladas; centeno, 350.000 toneladas; triticale, 692.000 y sorgo, 36.000 toneladas. En 2019 la producción española se situó por debajo de los 19 millones de toneladas.
Sin embargo, en lo que respecta al conjunto de la UE (más el Reino Unido), COCERAL ha revisado a la baja sus previsiones del mes de agosto. Apunta ahora a un volumen de 293,6 millones de toneladas, frente a los 295,5 millones en la estimación anterior y los 312,4 millones de toneladas obtenidos en 2019.
La estimación para trigo blando se mantiene en torno al nivel previsto en agosto: 129,2 millones de toneladas, lejos de los 146 millones del año pasado. La de cebada, sin embargo, baja a 61,3 millones de toneladas (frente a 62,5 millones estimados en agosto y 63,2 millones recogidos en 2019). El recorte se debe principalmente a la revisión de las estimaciones en el Reino Unido, algunos países de los Balcanes (en concreto en Rumanía y Bulgaria) y algunas regiones escandinavas y a pesar de la revisión al alza de la producción en España.
La previsión de cosecha de maíz cae a 62,8 millones de toneladas, frente a una estimación en agosto de 64,6 millones (y frente a 65,3 millones obtenidos en 2019). Los comerciantes explican que el calor y la sequía han reducido el potencial de rendimiento en algunos países, especialmente en Rumanía y Bulgaria.
