El año nuevo ha comenzado con nuevas subidas en los precios en origen del aceite de oliva. La categoría virgen extra se sitúa ya alrededor de los 9.000 euros por tonelada, llegando a superar esa cifra en las últimas cotizaciones fijadas en la Lonja de Extremadura (el ecológico hace ya varias semanas que rebasó ampliamente esta cifra). Esta tendencia al alza fue la dominante durante todo el año pasado, con excepción de algunas semanas del otoño, cuando se registraron bajadas, para recuperar las subidas en las últimas semanas de 2023.
Lo anterior tiene una explicación muy clara: a medida que se ha molturado la aceituna se ha comprobado que el rendimiento en aceite es más bajo de lo que se había esperado, por lo que difícilmente se alcanzarán una producción final de 700.000 toneladas de aceite de oliva. La campaña de recolección y molturación de la aceituna está muy adelantada y el grueso de la misma finalizará en las principales zonas productoras en un mes.
Lo más probable es que la tendencia alcista de los precios se mantenga a lo largo del primer cuatrimestre de este año, hasta que durante la próxima primavera se produzca la floración del olivo y se puedan hacer las primeras previsiones de cara a la próxima campaña. La otra clave está en la climatología que se registre en los próximos meses, ya que los olivos de Andalucía, la principal región productora, están muy afectados por la sequía y la falta de agua. Por eso es necesario que llueva durante todo el invierno y la primavera para que los árboles se recuperen de la situación de tensión hídrica, que han padecido durante las dos últimas campañas.
El año nuevo ha comenzado con las reservas de agua en la Cuenca del Guadalquivir por debajo del 20 por ciento. Por otro lado, las ventas de aceite de oliva en el mercado interior han caído de forma significativa por el aumento de los precios a los consumidores. Asimismo, han bajado las ventas al exterior por el mismo motivo. Estamos, por lo tanto, antes meses complicados en el sector del olivar.
Artículo de opinión de César Lumbreras publicado el 8 de enero en La Razón
